Los Patriots por fin pudieron dar una buena exhibición, y ganaron su primer partido en Gillette Stadium en lo que va de la temporada, importante victoria en contra de los Bills que son rivales divisionales, y que, si bien no llegaban en buen momento, nadie puede dudar de la calidad de su plantel. Se tardó mucho en llegar la victoria No. 300 para Bill Belichick, que sigue a la caza del récord de Don Shula.
Desde la primera serie ofensiva, el ataque patriota nos dio muestras de que salía enfocado, la línea ofensiva una vez más salió con alineación diferente, pero fueron una de las principales causas de que la ofensiva mejorara. En 9 jugadas los Patriots avanzaron 63 yardas y culminaron con un gol de campo de 30 yardas de Chad Ryland. El mariscal de los Bills, Josh Allen, en su primera jugada fue interceptado, no leyó correctamente y Jabrill Peppers aprovechó para interceptar. La ofensiva local aprovechó la situación y siete jugadas después con acarreo de dos yardas de Ezekiel Elliott se adelantaban en el marcador 10-0.
Los visitantes respondieron con una larga serie ofensiva de 13 jugadas y 57 yardas que consumió poco más de 7 minutos en el reloj de juego, sin embargo, una penalización por interferencia de pase a la ofensiva nulificó un touchdown y finalmente los Bills concretaron un gol de campo de 36 yardas para acercarse 10-3. Los equipos intercambiaron despejes con series de 3 y fuera. Los locales volvieron a mover las cadenas y culminaron su ofensiva con otro gol de campo de 24 yardas para adelantarse 13-3, para así irse al descanso, Buffalo tuvo la oportunidad de descontar la desventaja, pero erraron un gol de campo de 42 yardas.
El segundo tiempo comenzó con los visitantes al ataque, y orquestaron una marcha de 10 jugadas y 81 yardas para por fin visitar las diagonales tras una recepción de James Cook de 8 yardas, para acercarse 13-10. Los Patriots respondieron con el tercer gol de campo de Ryland, este de 49 yardas para adelantarse 16-10. En una larga marcha los Bills se internaron en territorio rival, pero fallaron al intentar concretar una cuarta oportunidad y 2. Comenzaba el último cuarto y faltaban muchas emociones, los Patriots anotaron por conducto de Kendrick Bourne a pase de Mac Jones y luego de fallar la conversión de dos puntos el marcador quedaba 22-10 faltando poco más de 7 minutos por jugarse. Buffalo respondió con una rápida serie de 5 jugadas y 75 yardas para acercarse con un pase de anotación de Allen a Diggs poniendo el tablero 22-17. Parecía que se venía la noche, pues en su propia yarda 29 Bourne pierde el ovoide para regresarle la posesión a Bills faltando casi 5 minutos. Los visitantes aprovecharon el regalo y le dan la vuelta al marcador con anotación de Dawson Knox y con la conversión de dos puntos Bills se adelanta 25-22 faltando 1:58 por jugarse. Los Patriots respondieron con una magnífica serie ofensiva dirigida magistralmente por Mac Jones que completó 7 pases, incluido el de anotación a Mike Gesicki faltando 12 segundos, para así poner cifras definitivas 29-25.
Conclusión
La victoria llega en un gran momento, pues detiene una inercia negativa de 3 derrotas (incluidas dos palizas), fue ante su público y en contra de un rival divisional. La ofensiva por fin pudo encontrar regularidad, la combinación Brown-Strange-Andrews-Sow-Onwenu en la línea ha sido lo mejor que nos han mostrado en la temporada, y Mac Jones por fon pudo orquestar una ofensiva para darle la vuelta al marcador. Ciertamente el partido no fue perfecto, pero representará un envión anímico para el equipo, y les permitirá trabajar mejor de cara a la siguiente semana.
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